El próximo 2 de diciembre, se presentará ante la Relatoría Especial del Derecho a la Alimentación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) un informe argentino sobre las graves falencias en las autorizaciones para los registros de agrotóxicos.
El próximo 2 de diciembre, se presentará ante la Relatoría Especial del Derecho a la Alimentación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) un informe argentino sobre las graves falencias en las autorizaciones para los registros de agrotóxicos.
Se resaltará la desidia del organismo de control (Senasa) en la revisión de registros, ante evidencias sobre «los riesgos que representan para la salud el glifosato, diazinón, malatión y 2,4-d, declarados como posibles cancerígenos», según afirma el portal El Federal.
Las organizaciones Naturaleza de Derechos y la Red de Médicos de Pueblos Fumigados elevarán el informe argentino ante la Relatoría para que la situación nacional esté presente en su análisis, ya que la Argentina está en el tercer lugar de países con más uso de agrotóxicos, detrás de EEUU y Brasil, pero encabeza la tabla en relación a litros aplicados por habitante.
Además se denunciará que la casi totalidad de las hortalizas y frutas que consumen millones de argentinos son expuestos a un número indeterminado de agrotóxicos, muchos de lo cuales fueron prohibidos como domisanitarios (sustancias o preparaciones destinadas a la limpieza, lavado, desodorización, higienización, desinfección o desinfestación para su uso en el hogar), a nivel local y en otros países. Con ello se adjuntarán investigaciones y estudios realizados por investigadores del Inta, la ONG Bíos de Mar del Plata y otros entes de contralor provinciales, sobre muestras de hortalizas y frutas que dan cuenta de la presencia de agrotóxicos en valores significativos.
Consecuencias. El informe es una requisitoria de la Relatoría Especial del Derecho a la Alimentación que en su próximo informe anual en el 34º período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, lo centrará sobre las consecuencias del uso generalizados de plaguicidas peligrosos en los derechos humanos, en particular el derecho a la alimentación. Por invitación del relator especial sobre el Derecho a la Alimentación el informe será redactado junto con el relator sobre Derechos Humanos y Sustancias y Desechos peligrosos de la ONU. Para ello, los funcionarios de la ONU han pedido contribuciones para ayudar a determinar en qué medida el derecho a la alimentación informa a las políticas gubernamentales sobre el uso de plaguicidas.
El informe argentino además relata el aumento exponencial del uso de agrotóxicos en la agricultura y en el proceso productivo de alimentos, la omisión deliberada de los ministerios de Salud (nacional y provinciales) en la realización de políticas que atiendan la problemática. Además denuncia la complicidad del poder político a través del no tratamiento de soluciones legislativas concretas, o bien legislando normas de flexibilización en el uso de agrotóxicos, y los casos de puertas giratoria o tranqueras abiertas.
Siendo que es una solicitud concreta y específica de las relatorías, se detallan en la presentación 18 casos donde la Justicia de distintas provincias de la Argentina ha dado respuesta efectiva y oportuna a los reclamos de los vecinos y asambleas contra el agronegocio, desde la perspectiva de la precaución, la no regresión ambiental y la penal.

Fuente: La Capital.